Fuego amigo en la ODCA

• Calderón y Espino cierran filas...
• Explosivas cortinas de humo

El éxito de una guerra, mi estimado, se mide por la cantidad de daño que causa. Oaxaca sigue dando la vuelta al mundo con sus multitudinarias marchas, sus inéditas imágenes, pero sobre todo por el original y peligroso impasse en que están las negociaciones con la administración foxista.

Y para ponerle el listón al explosivo coctelito, el asunto de las originales (y puntualmente informadas) detonaciones en la madrugada de ayer ocurridas en la sede de las lacritas tricolores, el TEPJF y sucursales bancarias, agrega el volátil condimento de inestabilidad, miedo, enrarecimiento y una cortina de humo previa al 20 de noviembre –en el que Andrés Manuel López Obrador, acompañado de su gabinete, tomará protesta en el Zócalo capitalino como “presidente legítimo”– donde en Guerrero se anuncian también simpáticas sorpresas y a unos días del, como diría el clásico insensato, divertido 1 de diciembre.

El gobierno federal y local están, como los republicanos y George W. Bush en Washington que se juegan su resto hoy, al borde de un ataque de nervios por el singular hilo conductor del modus operandi del explosivo reventón... que dista mucho de estar conectado con la APPO, las lacritas amarillas e inexpertos grupillos guerrilleros... sino con algo mucho más sofisticado... que ya le quita el sueño a más de uno... here & beyond, pero...

Vayamos a otra grilla internacional, querido lector, relacionada con la tenebra tras bambalinas alrededor de la elección donde compite Manuel Espino Barrientos como candidato para presidente de la ODCA, y que se llevará a cabo el próximo 11 en Santiago de Chile y, para variar, no falta el personaje con iniciativa que puso, al borde de una muy delicada confrontación internacional, al líder del PAN con... Felipe Calderón. ¿Listo para el ameno culebrón? Ahí le va.

El pasado 31 de octubre circularon interesantes misivas entre miembros de la ODCA, donde en una se puntualizaba que la campaña del presidente del PAN había estado llena de propuestas dentro de un clima de absoluto respeto y que, desde el anuncio por participar en la elección, se originaron dentro de la casa blanquiazul una serie de campañas sucias, golpes bajos, descalificaciones y, lo más delicado, el chantaje. O sea, fuego amigo, pues.

Al parecer varios ilustres miembros de la ODCA estuvieron, digamos, muy al tanto de las puñaladas traperas y a escasos días de los comicios, my friend, se identificó a un panista que fue cesado, hace varias lunas, del equipo de apoyo—y que generó ayer una peculiar tormenta en el CEN de Acción Nacional—de la dirigencia nacional del PAN, que no sólo se dedicó a enviar información falsa y dolosa, mi estimado, sino que se aventó (al revoltoso mar sin salvavidas) el puntadón de viajar por varios países latinoamericanos en nombre de Felipe Calderón —sin autorización del mismo o de su Gymboree— alentado por simpáticas amistades dentro de la... ODCA que presume, paradójicamente, de unidad y valores democráticos. ¿Atractivo, no cree?

El revoltoso se llama Rolando García Alonso, ex director de Relaciones Internacionales del PAN, a quien le dieron flit, entre otras cosas, por el escándalo de la visita de José María Aznar a México que originó una sacudida azul por la descoordinación interna en la información, y quien se encargó de difundir en varias naciones que la agenda de Calderón era darle de tubazos a Espino, originando, cual rápido efecto dominó, un importante cierre de filas entre Felipe y Manuel a la par de un desmentido enviado a los partidos políticos miembros de la ODCA, firmado por Juan Camilo Mouriño, donde con firmeza se aclara que Calderón Hinojosa, en estricto respeto a la autonomía del PAN (¿ajá?) y de la ODCA, se deslinda de entretenidas grillas, perdón, actividades relacionadas en la promoción de algún candidato en el mencionado proceso electoral.

Más allá del puntual control de daños y del oportuno manejo de la crisis, este sábado veremos si la ODCA y sus alrededores son como los pintan... o si de plano es otra simulación de democracia donde lo que valen, y pesan, son las impías ambiciones de una bola de identificados traviesos.

Así que corra por sus palomitas, my friend, porque esto se va a poner de pelos... espinaos.