Oaxaca: ingobernabilidad y AMLO

Se mostraron sólo los extremos, no los contrastes. Florestán

Andrés Manuel López Obrador estableció, durante su campamento en el Zócalo, que iba a crear condiciones de ingobernabilidad tales que provocaría la caída de Felipe Calderón de la Presidencia.
Pero no estaba claro si tendría la fuerza y arrastre necesarios para construir un movimiento que tirara a Calderón y asumir él como Presidente de la República.
Desde cuatro días antes de la derrota electoral en Tabasco, hace tres semanas, López Obrador desapareció. Y así se guardó hasta su irrupción, ayer, en el monumento a Juárez, donde se asumió al frente del conflicto de Oaxaca, posición que tendrá que pelear con su enemigo Marcos, quien también la pretende.
Esta reaparición coincidió con el traslado del conflicto de Oaxaca a la Ciudad de México pero ya en terrenos minados de la UNAM, una preparatoria y los CCH, de fácil combustión, más ahora, con la presencia de la PFP en aquella ciudad y el traslado del bastión appista a la Universidad Benito Juárez.
Es ahí, en los centros de educación superior del país, desde donde buscan prender la ingobernabilidad que haga imposible la gestión de Calderón como presidente de México.
Y no es que López Obrador esté organizando el conflicto, no; lo está aprovechando poniéndose ya a la cabeza, porque sabe los alcances que puede tener y la oportunidad que se le presenta para hacerse de la Presidencia desde la calle vía el estallamiento de la ingobernabilidad.
El esquema, en lo general, será una reedición de su estrategia contra el desafuero: la defensa de la legalidad y la democracia, y la condena a la represión y la corrupción, desde las movilizaciones populares.
Lo diferente ahora es el Presidente de la República en turno. El desafuero lo proyectó por la obstinada obsesión de Fox por eliminarlo de la contienda electoral; en esta nueva etapa el Presidente será Felipe Calderón y si bien Oaxaca, ya con AMLO a la cabeza, será su primera prueba, podría ser su primera oportunidad si sabe resolverlo.
Y no vaya a ser que ahora sea el factor de la caída de Ulises Ruiz, y convierta derrota en victoria, que en política es muy fácil.
Sólo hay que saber hacerlo, y vaya si sabe cómo hacerlo.

Retales
1. ZOPENCOS. Llegan insultantes correos desde la oficina de comunicación social del gobierno de Ulises Ruiz, pero con su remitente: gobiernooaxaca@prodigy.net.mx;
2. ALIANZA. Miguel Alemán aparece como el sucesor de Clemente Serna, Red; los Aguirre, R. Centro; y los Vargas, MVS, en una nueva sociedad de medios. Ya le contaré; y
3. GOLONDRINAS. Muy emotiva la comida que Olegario Vázquez Raña ofreció al presidente Fox y a su esposa Marta, el viernes pasado en su casa del Pedregal. Asistió todo el gabinete. El anfitrión y el Presidente hicieron el elogio de la amistad mutua.

Nos vemos mañana, pero en privado.