Myspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter Graphics Myspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter Graphics Myspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter Graphics Myspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter Graphics...

jueves, noviembre 02, 2006

¿Y ahora qué?


¿Y ahora qué? Entró ya la fuerza pública, tomó el centro de la ciudad y los senadores del PRI se sumaron al estruendo que pide la horca para Ulises Ruiz. ¿Pero puede alguien decir que Oaxaca tiene hoy mejor cara?

Leí hace unas semanas en MILENIO un magnífico artículo del pianista y director de orquesta Daniel Barenboin sobre la decisión de mutilar un Idomeneo de Mozart para no mortificar al extremismo musulmán. Escribió que ceder al miedo no apacigua a los fundamentalistas, que de todas maneras no tienen ninguna intención de apaciguarse.

¿Qué piensa obtener el gobierno federal con el avance, a paso de tortuga, de una tropa desarmada? ¿Pensará que con eso le alcanza para derrotar la estrategia del adversario y vencer?

El balance de las primeras 72 horas es una policía estacionada y una sublevación que se burla de la PFP en sus propias narices. No se percibe, además, un esquema operativo lógico y claro. La iniciativa parecería estar de nuevo en manos de la APPO.

Y es que parece que las encuestas volvieron a confundir al gobierno foxista. Cito una, la de GEA/ISA: 51 por ciento de la gente quería que se restableciera el orden, pero 56 por ciento se oponía al uso de la fuerza. La APPO y sus aliados leyeron rápidamente que la PFP aterrizó con precauciones extremas, pues, de seguro, el alto mando escuchó en la Ciudad de México que cada muerto significaría de 20 a 30 años de deterioro de la imagen del presidente Fox y sus secretarios de Estado.

No se puede vencer una resistencia así de feroz encomendándose miedosamente a las encuestas y al juicio benévolo de la historia. A Oaxaca había que llegar bien equipado y con el ánimo resuelto. Porque fracasar aquí será gravísimo. Gravísimo.