Myspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter Graphics Myspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter Graphics Myspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter Graphics Myspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter GraphicsMyspace Glitter Graphics, MySpace Graphics, Glitter Graphics...

miércoles, noviembre 08, 2006

Partidarios de Saddam amenazan con represalias por sentencia

Ex presidente iraquí llama a la reconciliación entre árabes y kurdos
Simpatizantes del ex presidente iraquí Saddam Hussein manifiestan en rechazo a la pena de muerte(AFP)



Dubai.- El partido iraquí Baas, disuelto tras la caída del líder Saddam Hussein, amenaza con lanzar ataques contra el sector altamente protegido del centro de Bagdad en caso de que se aplique la sentencia de muerte al ex dictador, según un comunicado difundido en Internet.

"Si el presidente Saddam Hussein es ejecutado, el partido actuará con todos los medios disponibles para destruir las sedes de las embajadas y de los servicios de inteligencia de Estados Unidos en la Zona Verde", afirma el "comando" del Baas en el comunicado, señaló AFP.

"Estados Unidos e Irán, su aliado, han hecho explotar una bomba que afectará a todos los conspiradores y a sus lacayos en Irak y en el exterior", añade el partido, recalcando que "el veredicto coincide con las elecciones parlamentarias para servir a los intereses republicanos".

El Baas era el partido único bajo el régimen de Hussein y fue disuelto tras el derrocamiento de este último en abril de 2003 por una coalición militar estadounidense-británica.

Entretanto, el organismo para la erradicación del partido Baas anunció su disposición a que un millón de ex miembros de dicho partido recuperen los cargos públicos que perdieron tras la caída del régimen.

Alí al Lami, vocero del organismo, aseguró que, además, presentarán un proyecto de ley para reducir de 30.000 a 15.000 el numero de ex dirigentes baasistas que no pueden desempeñar cargos públicos.

Entretanto, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, afirmó que por principio se opone a la pena de muerte, al referirse a la condena de Hussein, pero señaló que primero habría que condenar al gobernante estadounidense George W. Bush por "genocidio".

"Han condenado a muerte a Saddam. Como respetuosos de la vida, nos oponemos a la pena de muerte, pero si de condena se tratara, al primero que habría que condenar con la más grande pena de este planeta es al presidente de EEUU", señaló.

Un nuevo juicio
Saddam Hussein volvió a ocupar el banquillo de los acusados para ser juzgado en Bagdad por genocidio contra los kurdos, dos días después de ser condenado a muerte en otro proceso por la matanza de 148 shiíes.

Con una actitud aparentemente distendida, Saddam afirmó que amaba a los kurdos tanto como a los "árabes" e instó a la "reconciliación" entre ambos pueblos en Irak.

Junto a Saddam, otros seis coacusados son juzgados por haber ordenado la campaña Anfal que dejó 180.000 muertos en el Kurdistán iraquí, según la acusación. En este proceso todos ellos podrían ser condenados a muerte.

Por otra parte, al menos 17 personas murieron en un atentado suicida en Bagdad. Otras 20 personas resultaron heridas en este atentado, cometido por un kamikaze que se hizo explotar en un café de el barrio shií de Greyaat, indicaron fuentes de la seguridad y médicas iraquíes.

Mientras, el Ministerio del Interior acusó a unos 100 empleados, incluyendo un general de la policía, de haber participado en la tortura de detenidos en la prisión Site 4 de Bagdad.